La
solución es el Canfranc
(José Antonio González - Secr. Gral. de OSTA - HERALDO
DE ARAGÓN - 11/07/11)
La
eliminación de la Travesía Central del Pirineo de la planificación de
redes prioritarias transeuropeas, por parte de la Comisión Europea, no nos
debe pillar de sorpresa.
Ya
en el Acuerdo Social y Económico suscrito en febrero de este año por CCOO,
UGT, CEOE y CEPYME, con el Gobierno de España, se manifestaba la apuesta
por la actualización del Plan Estratégico de Infraestructuras de
Transporte, otorgándole prioridad al Corredor del Mediterráneo, sin
mencionar, ni siquiera, la existencia de la Travesía Central del Pirineo.
A la
vista de las informaciones publicadas parecía más que evidente que la
verdadera apuesta del Gobierno Central era el Corredor Mediterráneo, pues
resultaba muy difícil creer que en estos tiempos de crisis pudieran
compatibilizarse las inversiones del Corredor Mediterráneo con las de la
Travesía Central del Pirineo. Por ello, parece lógico pensar que la
elaboración de la propuesta de la Comisión Europea ha contado, desde el
primer momento, con la participación del Ministro de Fomento.
Por
este motivo OSTA denuncia que el Gobierno Central ha engañado a los
aragoneses, generando falsas expectativas y además, que en esta maniobra
de distracción, ha contado con la colaboración de los mencionados agentes
sociales estatales y, por supuesto, con el Gobierno de Marcelino Iglesias.
Con
la determinación de las redes prioritarias transeuropeas se pone fin al
engaño.
Ahora los aragoneses podemos hacer dos cosas, lamentarnos del maltrato
sistemático del Gobierno Central, echando balones fuera argumentando que
tenemos poca población, que no tenemos peso político en Madrid, que los
catalanes presionan mucho más, o responsabilizarnos tomando las riendas de
nuestro futuro.
Con
este pronunciamiento, al nuevo Gobierno de Aragón se le ofrece la
oportunidad de definir su verdadera alternativa, que no puede ser otra que
retomar en serio la puesta en marcha del eje ferroviario del Canfranc.
El
estudio del Consejo Económico y Social de Aragón demuestra que la
reapertura del Canfranc es una obra posible, viable y rentable. Su coste
no pasaría de los 318 millones de euros, su ejecución tardaría no más de 4
años y su puesta en marcha supondría que las empresas aragonesas podrían
reducir un 22% el coste del transporte internacional de sus mercancías,
haciendo que la explotación de la infraestructura fuera viable desde el
primer año.
La
reducción de los tiempos y costes del transporte que posibilitaría el
Canfranc, redundaría en la mejora de la competitividad de nuestra
industria exportadora, principal instrumento para empujar a nuestra
economía a salir de la crisis.
La
gran apuesta por la logística se quedará en una iniciativa de carácter
regional si no es capaz de ofrecer una rápida conexión con las redes de
transporte internacionales.
Por
ello el Gobierno de Aragón debe liderar este proyecto propiciando un
amplio consenso y ofreciendo participación a todas las fuerzas políticas,
sociales y económicas aragonesas. El Gobierno de Aragón debe tomar las
riendas y exigir al Gobierno Central su derecho a ejecutar las obras y a
buscar las fórmulas para explotar la línea.
Este
puede ser el mejor comienzo para la Presidenta Rudi: demostrar su
compromiso con Aragón, liderando a toda la sociedad aragonesa para hacer
valer ante el Gobierno Central la fuerza de la razón y de nuestro derecho
a labrar nuestro futuro.
José
Antonio González
Secretario General de OSTA